Meretrices deben acostarse con policías cómplices de proxenetas venezolanos en Perú

Mujeres y travestis meretrices realizan grave denuncia contra la Policía de Trata y aseguran que por ello es que no capturan a los proxenetas.

 

 

Pese a las constantes denuncias anónimas de meretrices contra proxenetas extorsionadores, quienes incluso advirtieron que temían que las maten, la autoridad policial poco o nada ha hecho para capturar a esos delincuentes que siguen haciendo de las suyas en la ciudad de Chiclayo, Perú.





Por Perla Polo / Diario Correo

Tal como Correo informó en sus diversas ediciones anteriores, los hampones de nacionalidad venezolana alias “Kevin” y “Gordo” siguen sometiendo a sus amenazas, tanto a mujeres como homosexuales dedicados a la prostitución clandestina.

Esto para obligarlas a pagar un cupo de extorsión, el cual inició en el 2022 con 50 soles semanales por cada una. Hoy en día les cobran entre 100 y 150 soles y, de pasarse el horario de entrega de la “cuota”, ellas y ellos deben cancelar 50 soles más.

Correo pudo entrevistarse nuevamente con alguna de las chicas y travestis que están atemorizadas, pues creen que las próximas víctimas serían ellas, al no tener protección de la Policía.

Aseguraron que la red criminal de “Kevin” y “Gordo” la integran varios maleantes que pululan en los distritos de La Victoria, José Leonardo Ortiz y Chiclayo.

“Nosotras no podemos conversar con ninguna persona extraña que no sea solo para darle sexo, antes a un chico lo acuchillaron solo por dialogar conmigo. La Policía no hace absolutamente nada, no quieren capturar a esos verdugos que nos van a matar porque están arreglados”, sostuvo Marley, una de las agraviadas.

De igual forma, su compañera realizó una grave denuncia en contra de los agentes del área de Trata de Personas de la División de Investigación Criminal (Divincri).

“De manera mensual llegan los de Trata de Personas, pero solo hacen operativos para llevarnos a su sede por ser extranjeras indocumentadas. Solo estamos un par de horas porque Kevin arregla con los policías para que nos suelten y no nos revisen los celulares. Sabemos que les dan sus monedas en una bolsita (dinero) y también los uniformados piden gratis sexo con la mejor de las chicas y la más joven. El año pasado hasta con los serenos teníamos que acostarnos”, aseguró Antuané quien ya está cansada de seguir trabajando para pagarle a”Kevin”.

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