Entre síntomas y avatares, por Imelda Cisneros

Entre síntomas y avatares, por Imelda Cisneros

Éste año el país se verá desbordado de información de todo tipo y opiniones contrastantes y diversas , costará saber que es verdad, en quien o en que se puede confiar.

Los escenarios preelectorales suelen ser así, este será aún más crítico, hay que estar entonces atentos a señales y sobre todo a leerlas de forma sobria, profunda y sensata, no podemos permitirnos análisis superfluos y simplista en un entorno en donde prevalece la desinformación promotora del desencanto, la antipolítica y la malignidad.





Por lo pronto observo que:
.Sectores populares, sin líderes mesiánicos se están conformando en una fuerza social que ya brilla con fuerza propia.
.La sociedad civil está vigorizada, está generando un genuino y transparente crecimiento comunitario y gremial.
.La iglesia que es un factor de poder lo está ejerciendo con generosidad y amplitud.
.El sector público por vez primera en nuestra historia, depende del auxilio y apoyos del sector privado local e internacional para sobrevivir a lo que parece un retroceso en el supuesto sólido crecimiento.
.El empresariado acendrado que queda en el país sigue enfocado y comprometido con esta tierra, defendiendo su patrimonio y apalancándose en oportunidades.
.La unidad revolucionaria está resquebrajada por profundas incongruencias y desavenencias en su proyecto ideológico, entre auténticos y falsos reformadores
.La desigualdad es más peligrosa entre militares que entre civiles y entre ellos la están sintiendo. A pesar de qué la institución militar está desarticulada, esa situación esta teniendo consecuencias que habrá que monitorear.
.La oposición debe armonizar sentido común con sentido de pais. La comisión de primarias ha puesto la mesa para un banquete democratico, asistiremos muchos.
.A pesar de todos los pesares, la comunidad internacional no reconoce gobiernos ilegítimos ni dictaduras, aboga por salidas democraticas y electorales.

Resulta dificil ser pacientes cuando esperamos con ansias el resultado de una situación deseada.

Es natural querer cambiar las condiciones injustas e indeseables a la que nos han sometido pero es importante la perspectiva desde la cual emprender la tarea de una sostenible transformación.

No nos atemos a la desinformación, la coyuntura y las apariencias, veamos las cosas como son!!