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La desesperación de los migrantes que esperan el fin del Título 42 llevó a una familia venezolana a lanzarse al río Bravo por una zona profunda y cubierta por maleza con una bebé de un año.
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Aseguran que el temor más grande es seguir en las “condiciones infrahumanas” en las que viven en México, mientras esperan un milagro que los beneficie en cuanto a su situación migratoria en Estados Unidos, según informó Noticias Telemundo.
Otros migrantes tratan de pasar por la valla que separa al país con la frontera de México.
El sueño de Dairelys Fajardo, otra venezolana que busca cruzar hacia EEUU, es poder darle una mejor calidad de vida a su hijo de ocho años que sufre parálisis cerebral.
A continuación, las desgarradoras imágenes.