Mide 1.90 y gana 100.000 dólares al mes en OnlyFans mostrándose como “una gigante” (Sí, hay FOTOS)

María Temara | Twitter

 

Su altura solía hacerla sentir avergonzada. Su casi 1,90 metro -1,87 para ser precisos- la complicó toda la vida. Sin embargo, tras la crisis que vivió durante la pandemia de coronavirus, se convirtió en su tabla de salvación. Y una muy buena.

Por: Clarín





Es que María Temara decidió sacar ventaja de su estatura y comenzó a publicar sus imágenes en OnlyFans. Así, “jugando a ser gigante” en la plataforma pornosoft, llegó a ganar hasta 100.000 dólares en un mes.

Del Bullying al éxito: la historia de María Temara

De pequeña la pasó mal. Durante todos los años de escuela, sus compañeros la acosaron por su altura. Ahora, después de descubrir que a sus fanáticos les encanta, asegura que se siente feliz con su tamaño, publicó The Mirror.

“Empecé a sentirme orgullosa de ser alta. Llevé tacos de quince centímetros a un bar al que fui con mis amigos por primera vez el año pasado y me sentí increíble. Todos me miraban pero yo estaba feliz. Si a la gente no le gusto porque soy alta, ese es su problema”, contó la joven de 27 años.

Pero aunque ahora se gana la vida gracias a su estatura, durante años María detestó pertenecer a una “familia de gigantes”, que incluye a su padre Mike (61), que mide 1,87 metro, y a sus hermanos Shane (26) y Troy (24), ambos jugadores de básquet que miden 2,05 metros.

 

Afortunadamente, su suerte cambió después de que publicó un video en TikTok hablando de ser alta.

“Siempre odié ser tan alta y deseaba poder ser como una de las otras niñas. Cuando publiqué por primera vez un video que decía que medía casi 1,90 y pesaba 90 kilos, no pude creer la respuesta. Todos los comentarios fueron positivos y encantadores”, dijo.

Y sumó: “Pasé de ser la persona a la que ningún chico quería a que todos pensaran que era guapa. Muchas chicas me enviaron mensajes en privado diciendo que significaba mucho para ellas tener a alguien a quien admirar”.

María, que vive en Florida, Estados Unidos, recordó los días en los que asistía a la escuela y sobresalir entre la multitud provocaba el acoso entre sus compañeros.

“Siempre fui una cabeza más alta que los demás. Solía ????ser intimidada por ser tan enorme. La gente me llamaba niño por mi estatura, lo cual era realmente difícil -le explicó al medio-. Y fue más difícil aún cuando llegué a la secundaria, porque ahí es cuando te empiezan a gustar los chicos y yo era mucho más alta que ellos”.

 

En ese momento, comenzó a caminar encorvada y a tomar la misma postura en las fotos. Todo lo hacía para parecer más baja.

Excelente alumna en la universidad, en cuanto terminó comenzó a trabajar como contadora. Sin embargo, su vida personal era mucho menos exitosa.

“Las citas eran realmente difíciles. Solía ????buscar sólo hombres altos”. Conocer gente se le complicaba.

Pandemia, crisis y cambio radical

Año 2020. El mundo estaba paralizado. Un virus lo había puesto en pausa. La crisis llegaba a niveles impensados. Tanto, que en abril María perdió su trabajo.

Como si esto fuera poco, en agosto del año siguiente terminó una relación que había logrado mantener por un tiempo. Sentía que el mundo a su alrededor se derrumbaba. Ahí decidió probar algo diferente.

En ese momento se volvió viral tras hacer el video sobre su altura en TikTok.

Los resultados la sorprendieron. A sus seguidores les gustó mucho; la gente comentó que se veía muy bien y le agradecieron por compartir, asegurando que finalmente tenían a alguien a quien admirar.

Incluso hasta su madre y su abuela se unieron a sus videos, describió The Mirror en un artículo sobre María.

 

Hacer dinero con su altura

Vender sus fotos y publicarlas en OnlyFans significa que Marie ahora puede ganar entre 80.000 y 100.000 dólares al mes.

“Alguien me sugirió que debería probar OnlyFans después de ver mis videos de TikTok, así que comencé en 2021. Ahora gano en un mes lo que solía ganar en un año”, cuenta feliz.

A pesar de la ventaja lucrativa que ahora descubrió gracias a su altura, Marie dice que todavía encuentra inconvenientes en la vida cotidiana. Sus pies “cuelgan” de la cama; está incómoda en su auto -admite que necesita una camioneta; y debe doblarse mucho debajo de la ducha.

La joven, además, no le quiere dar la espalda a la contabilidad, una carrera que ama, y está pensando en iniciar un negocio propio en el futuro.

Pero, por ahora, está feliz de aprovechar al máximo su nueva fama mientras difunde un mensaje positivo sobre verse diferente.