Los comerciantes en Falcón aún no cobran el nuevo impuesto chavista porque están “vueltos un ocho”

Los comerciantes en Falcón aún no cobran el nuevo impuesto chavista porque están “vueltos un ocho”

El desconocimiento de la norma hace que nadie aún lo cobre, aunque existe una gran preocupación en los consumidores

 

En el estado Falcón no se ha comenzado a cobrar el Impuesto de Grandes Transacciones Financieras (IGTF), anunciado por el régimen de Nicolás Maduro, aunque esto significa una gran confusión y preocupación para comerciantes y compradores, ya que no existe una explicación clara de cómo funcionará este impuesto.

Por: Corresponsalía La Patilla





Comerciantes consultados por La Patilla comentaron que la mayor preocupación es adjudicar nuevamente el sistema tributario que incluye las máquinas y hacer un gran gasto para el que no están preparados.

“Apenas se está estabilizando el precio del dólar en comparación a años anteriores, cuando su valor variaba hasta 100 puntos en un día. Se había notado un poco la estabilización de la economía y ahora lanzan este impuesto. Ya no sabemos cómo sobrevivir a ello. Esperamos que nos orienten qué es lo que vamos a hacer”, dijo un comerciante de origen asiático que vende víveres al mayor y que prefirió no identificarse.

Por su parte, María Bautista Colina, habitante de Punto Fijo y ama de casa, desconoce por completo el anuncio del nuevo impuesto. “Uno anda rasguñando para buscar dinero y comprar lo mínimo que necesitamos en la casa. Mis hijos me mandan dinero de afuera y mi esposo está en cama luego de un ACV. No sé cómo esto afectará aún más la economía de la casa. Camino mucho, buscando los mejores precios para llevar los alimentos a la casa, pero cada vez la remesa alcanza menos”, dijo.

El Presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Paraguaná (Cacoinpar), Francisco Melián, explicó que en la región ninguna empresa ha comenzado a cobrar el IGTF, porque no se entiende. Por tanto, desde la cámara se solicitará una prórroga de un año para adecuar el sistema y explicar a detalle este nuevo impuesto que definitivamente va a afectar al consumidor final, pero también al comerciante.

“En este momento el comercio está de cabeza, porque su aplicación fue muy temprana, hay lagunas mentales y dudas sobre esto. Los desarrolladores de software no lo han actualizado por las dudas que se han generado con la aplicación del impuesto y las empresas aprobadas por el Seniat para hacer el cambio de las máquinas fiscales están desbordadas y no se han dado abasto para hacer los respectivos cambios”, expresó.

La inflación podría aumentar entre 15 y 16 % en este segundo trimestre del año, según Cacoinpar

 

Esto ha generado que nadie en la región esté cobrando el IGTF, simplemente porque el software administrativo ni la máquina fiscal se lo permite. Entonces no se puede cobrar un impuesto al que no se le puede emitir una factura. Aparte del desconocimiento de cómo se va a aplicar la ley. “Un ejemplo claro de ello es que si yo le voy a hacer una transferencia en dólares a un proveedor que es agente de retención, me retiene el banco o me retiene el proveedor. No me pueden retener los dos, porque sería un pago doble de impuesto”.

Afirmó que han pedido reuniones con la gerencia de tributos internos para que aclare las dudas que tiene el comercio de la región y hasta el momento no lo han logrado. Por ello han pedido una prórroga grande para que se adecuen los sistemas.

“Obviamente esto va a causar un fuerte impacto en el mercado en un país donde el 70% de las transacciones se hacen en divisas. Creemos también que después de haber terminado el último trimestre del año 2021 en crecimiento, esto es una traba para continuar con ese crecimiento que se logró a finales de año. Esto viene a cercenar de alguna manera el desarrollo económico y por supuesto va a generar inflación de hasta un 15 o 16%, es decir, que los márgenes de inflación que se manejaban hasta ahora, se estima que se dispare en el segundo trimestre de 2022”, concluyó.

Las dudas continúan y se acrecientan, mientras el régimen guarda silencio ante las solicitudes del comercio en aras de explicar la norma y comenzar el proceso de adecuación.