La estrategia que habría tenido Piedad Córdoba para beneficiar a las Farc

La estrategia que habría tenido Piedad Córdoba para beneficiar a las Farc

Una gran polémica surgió recientemente a partir de las declaraciones hechas por Íngrid Betancourt en las que señala a Piedad Córdoba de ser alias Teodora, de las Farc, y de haber retrasado deliberadamente su liberación para obtener dividendos políticos.

Por semana.com





La hoy precandidata presidencial, en diálogo con Vicky en SEMANA, manifestó: “Cuando ‘Teodora’ -Piedad Córdoba- escribe que ‘no suelten a Íngrid porque ella siempre ha sido flaca’, Teodora ignora que yo en ese momento me estoy muriendo, es decir, estaba en una situación de salud muy complicada”. Vale la pena recordar que Betancourt estuvo secuestrada desde 23 de febrero de 2002 hasta el 2 de julio de 2008, cuando se logró su rescate en medio de la histórica Operación Jaque.

Sin embargo, queda la pregunta sobre cuáles serían los dividendos políticos a los que -según Íngrid Betancourt- aspiraba Piedad Córdoba, quien para el año 2007, cuando se adelantaban conversaciones sobre un eventual canje de prisioneros por secuestrados entre el Gobierno y las Farc, habría sostenido conversaciones bastante cercanas con los miembros del secretariado de la extinta guerrilla.

SEMANA tuvo acceso a lo consignado en varios correos electrónicos del computador de Raúl Reyes en los que se registran conversaciones con alias Teodora e Iván Márquez. En el material conocido por este medio se detalla lo que habría sido la estrategia para catapultar el reconocimiento político de las Farc a partir de la liberación de secuestrados.

En un primer correo, con fecha del 6 de septiembre de 2007, alias Raúl Reyes se dirige al Secretariado de las Farc y da cuenta de las pretensiones políticas que ya habrían tenido previstas Piedad Córdoba, Hugo Chávez y la guerrilla.

“Piedad asegura que Chávez está decidido a emplear todas sus fuerzas en el objetivo del canje y promoverlo en sus canales de comunicación. Le dijo que desea conversar con el camarada (Manuel Marulanda) de muchos temas de interés recíproco, incluido el canje. Que es una forma de relanzar a las Farc en el mundo o al menos en la región, para lo cual buscará el apoyo de otros gobiernos amigos como Lula, Kichner, Morales, Correa, Ortega y Torrijos (como cosa rara no menciona a Fidel (Castro) considera posible conseguir apoyos importantes en Europa”, dice en el correo.

En un segundo punto del mismo mensaje, se lee la consigna “Piedad odia a Petro, no lo baja de HP, y habla de la necesidad de romper su vínculo con Chávez, aunque dice ha perdido credibilidad”.

“(…) Piedad no lo dice, pero todo indica que Chávez la está empujando a liderar la oposición a Uribe con miras a la contienda electoral de 2010. Pide venir a conversar con nosotros el canje, dando las vueltas que sean necesarias para evadir el seguimiento de la inteligencia enemiga. Se muestra con altas simpatías por el Camarada y las Farc, asegura que si no existiera la situación de la oposición a Uribe sería mucho más calamitosa”, agrega el correo.

Estrategia para favorecer a las Farc y a Hugo Chávez

Un segundo correo conocido por SEMANA, con fecha del 17 de septiembre de 2007 cuyo remitente es alias Teodora (quien sería Piedad Córdoba) y el receptor probablemente sea Luis Edgar Devia Silva -Raúl Reyes-, se reseña el proceso adelantado por Córdoba con miras a la reunión proyectada para el 8 de octubre de ese año entre las Farc y Hugo Chávez en Venezuela. Al final del mensaje se leen los objetivos previstos para el encuentro, los cuales textualmente dicen:

1 El reconocimiento y la legitimidad que otorga las Farc a la facilitación tuya y del presidente Chávez. En esto coinciden con el gobierno, lo cual crea un clima de confianza para las partes.

2 El compromiso político en la búsqueda de un acuerdo humanitario y la liberación de los rehenes.

3 La posibilidad que se dé una reunión con el comandante Marulanda.

4 El inicio de una ronda de reuniones previas a la entrevista de Chávez con Marulanda.

5 La legitimidad que otorga a la reunión con los congresistas demócratas y con los familiares de los rehenes norteamericanos, lo cual pone al gobierno de EE. UU. en otro terreno. Apoyar el proceso.

6 El deseo de iniciar el proceso sin alargar su comienzo. Una fecha cercana 8 de octubre. En la ruta para la posible reunión de octubre me parece que se podría pensar en una agenda compartida de manera que se genere confianza y esa primera reunión la veo como algo más informal, como un primer conocimiento cara a cara de los facilitadores con las personas que deleguen. Yo creería que es bueno indagar con un experto o experta en facilitación cuál sería la mecánica y la agenda a seguir en dicha reunión, pues esta se convierte en algo crucial, de su éxito depende el curso a seguir en la facilitación.

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