Crece la angustia en Margarita ante el aumento de la trata de personas hacia el Caribe

Crece la angustia en Margarita ante el aumento de la trata de personas hacia el Caribe

 

La sociedad civil organizada de la isla de Margarita, se siente inquieta con el crecimiento del delito de la trata de personas con fines de explotación sexual, desde Margarita hacia otras islas del Caribe, pero principalmente hacia Trinidad y Tobago.





Por Dexcy Guédez La Patilla

Luis Ávila Guerra durante su participación como facilitador del foro “Inseguridad y violencia” del programa “Más ideas de todos”, promovido por Frente Amplio Venezuela Libre y otras organizaciones civiles, destacó que mientras otros delitos han tenido tendencia a la baja, ese nuevo flagelo sigue cobrando auge.

Luis Ávila Guerra

Aunque no tienen estadísticas oficiales, ya que los organismos de seguridad responden a los intereses del régimen de Nicolás Maduro y, en consecuencia, están negados a dar a conocer la incidencia de ese delito, cuyo incremento es preocupante.

Mencionó que al inicio de este año, el Observatorio Venezolano de Violencia en Nueva Esparta, encendió las alarmas relacionadas con la práctica de ese flagelo. Esa organización que cuenta con el respaldo de gremios profesionales y sindicales, atribuye el incremento de los casos a la caída de los ingresos y de la calidad de vida de los margariteños y cochenses.

“Siempre el estado Nueva Esparta se caracterizó por su alta de calidad de vida en comparación con otras regiones del país, pero hoy lastimosamente se encuentra a la par de otras zonas que siempre han estado deprimidas como el estado Sucre”, expuso Ávila Guerra.

Resaltó que precisamente es esa entidad el puente seleccionado por las mafias que manejan el tráfico de personas hacia el Caribe utilizando como puente el puerto de Güiria. El expositor exhortó a las autoridades a aplicar controles para frenar ese delito, así como también a los familiares a dejar el miedo y denunciar la migración de integrantes del núcleo familiar hacia las demás islas caribeñas.

“Es necesario que tomen en cuenta que las variantes más frecuentes son el ofrecimiento de trabajo como recepcionistas en hoteles de lujo, anfitrionas o modelo de productos de marcas reconocidas, pero al final terminan ejerciendo oficios que están confrontados con la buena moral que caracteriza a los neoespartanos”, remarcó el ponente.