Un bebé recién nacido encontrado abandonado en un gavetero tirado en un callejón ha sido rescatado por paramédicos.
Por Mirror
Un miembro del público encontró al bebé escondido dentro del mueble, que había sido tirado en el vecindario Montclare de Chicago en Estados Unidos.
La mujer, que pidió permanecer en el anonimato, dijo que el pequeño estaba envuelto en un rosario y tenía la boca llena de vómito.
Las autoridades dijeron que el bebé tenía menos de una semana.
El rescatista dijo que la cómoda le llamó la atención mientras caminaba por la cuadra, informó ABC7 Chicago .
Dijo a los periodistas que originalmente había planeado quitar las manijas para reutilizarlas.
Cuando abrió el cajón, encontró al bebé acostado allí.
“Puse mi dedo en el pie pequeño, solo para ver que se estaba moviendo”, le dijo a NBC.
La mujer no identificada permaneció en el lugar hasta que llegaron los servicios de emergencia y lo llevaron al Hospital de Niños Lurie.
Está en buenas condiciones, dijo un portavoz del Departamento de Bomberos de Chicago.
El portavoz Larry Langford dijo que fue una suerte que alguien pasara junto a la cómoda y encontrara al bebé, considerando las altas temperaturas en la ciudad hoy, que han superado los 30 ° C.
“Es una suerte que haya venido alguien. Hace calor allí, podría haber terminado de manera diferente, pero aparentemente todo salió bien ”, le dijo al Chicago Tribune .
Karie James, portavoz del Departamento de Policía de Chicago, dijo en un correo electrónico que la policía estaba investigando.
Bajo la ley “Safe Haven” de Illinois, promulgada en 2001, un padre puede entregar con seguridad a un bebé de 30 días o menos a un hospital, estación de policía, estación de bomberos o instalación médica de emergencia y dejar al bebé con el personal de la instalación sin temor. de repercusiones legales.
Candy Pittner, que vive en el área donde se encontró al recién nacido, le dijo a WLS-TV que está indignada de que alguien simplemente deje a un bebé con la basura cuando hay tantos lugares seguros donde se puede dejar a un niño.
“Podrías incluso haber tocado el timbre de mi puerta, me habría llevado al bebé y me habría ido. Cualquier cosa menos dejarlo en ese cajón ”, dijo Pittner.