Una pareja de Florida murió en un presunto asesinato-suicidio descrito por un policía como “la escena del crimen más espantosa en la que he trabajado”, según los informes.
Por New York Post
Sabrina Marie Dumdei, de 37 años, y Zachary John Winton, de 34, fueron encontrados muertos el sábado por la tarde cuando el padre de Dundei fue a ver cómo estaba en el complejo de apartamentos en Anna Marie Island, informó la estación de noticias WWSB .
“[El padre de Dundei] llegó a la casa y se dio cuenta de que ella estaba en el suelo,” el jefe de policía de Bradenton Beach Sam Speciale dijo a la Anna Maria Isla del Sol. “Rompió la ventana de una puerta para entrar y la encontró en el suelo”.
La pareja fue pronunciada en el lugar y se ordenaron autopsias para determinar más sobre lo que condujo al fatal incidente, informó el medio.
Sargento. Lenard Díaz, quien lidera la investigación, dijo que no estaba claro de inmediato qué causó las lesiones de la pareja.
“No tenemos idea. Todo lo que puedo decirles es que hay mucha sangre”, dijo Díaz al periódico.
Se podía ver sangre salpicada en la puerta corrediza de vidrio de la casa y había una silla de plástico manchada de sangre en el balcón, informó el medio.
“Esta es probablemente la escena del crimen más espantosa en la que he trabajado, la peor que he visto en 37 años”, dijo Díaz. “Va a ser muy difícil reunir lo que ocurrió, cuáles fueron los eventos cronológicos que llevaron a las muertes reales”.
La policía dijo que había habido informes anteriores de violencia doméstica en el hogar.
Dumdei fue arrestada en julio después de que supuestamente arrojó una lata a Winston, pero los cargos fueron retirados más tarde, informó el periódico.
Luego, se ordenó a Winton que no tuviera contacto con Dumdei después de que fue arrestado el 29 de agosto en la casa por cargos de asalto agravado con un arma mortal, manipulación de un testigo, encarcelamiento falso y agresión doméstica, informó el Bradenton Herald .
“La mataré. Ella pagará”, supuestamente dijo Winton mientras estaba arrestado. “Si me acusan de delitos graves, la mataré yo mismo. Le cortaré el cuello”.
La orden de no contacto se levantó el mes pasado después de que su abogado argumentó que nunca antes había sido acusado de un delito grave y no tenía antecedentes de violencia física, pero el caso seguía abierto en el momento de sus muertes, informó Anna Maria Island Sun.