James Jackson, un pastor de Palm Beach, Florida escandalizó a su poblado pues se descubrió que engañaba a niñas para abusarlas sexualmente y además su esposa Valerie era cómplice.
Se le acusa de al menos 11 cargos de abuso sexual a menores, esto después de tres víctimas y cuando su esposa decidió hablar con las autoridades.
En las declaraciones, James sabía cómo convencer a sus víctimas, controlándolas y convenciéndolas de que eso era normal.
La defensa de James dijo que todo era mentira pero sin fundamentos para justificar que los testimonios eran falsos.
Valerie también tendrá una condena que comenzará a cumplir a partir de 2019 por el delito de James, pues aceptó que a pesar de conocer todo lo que hacía su esposo, no lo denunció.
“Jackson creó este mundo donde estas chicas realmente pensaban que esto estaba bien y era normal”, declaró la fiscal del caso Lindsay Bruno.
Durante dos días de declaraciones, James Jackson fue declarado culpable, aunque aun no se sabe cuántos años de condena recibirá, aunque se especula que serán décadas enteras.
Con información de Tribuna.