Unasur exigió al Gobierno esclarecer hechos de violencia contra los diputados de la MUD

Unasur exigió al Gobierno esclarecer hechos de violencia contra los diputados de la MUD

EPA/JOSE JACOME
EPA/JOSE JACOME

La Secretaría General de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) rechazó los actos violentos registrados hoy en Caracas y pidió a las autoridades esclarecer los hechos y determinar las responsabilidades correspondientes.

EFE

La Secretaría, con sede en Quito, señaló en un comunicado que también rechazan la violencia los expresidentes José Luis Rodríguez Zapatero (España), Leonel Fernández (República Dominicana) y Martín Torrijos (Panamá), quienes acompañan -a instancias de la Unión- el esfuerzo para sentar las bases de un Diálogo Nacional en Venezuela.

La Unasur y los exmandatarios “expresan su rechazo a todo tipo de violencia que pueda afectar la firme determinación de todos los venezolanos, apoyados por la comunidad internacional, por generar las condiciones que permitan llegar a una convivencia pacífica”.





Asimismo, hacen “un firme llamado a las autoridades competentes para esclarecer los hechos y responsabilidades correspondientes”.

La Secretaría General de la Unión, finalmente, reitera su llamado “a todos los actores políticos de Venezuela para solucionar de manera pacífica y democrática sus legítimas diferencias”.

La reacción de la Unasur se dio luego de que varios diputados venezolanos, entre ellos el jefe de la bancada opositora del Parlamento, Julio Borges, fueran agredidos hoy frente a la sede del Poder Electoral.

Los diputados opositores protestaban para exigir una respuesta del organismo sobre el proceso de referendo revocatorio del mandato del presidente Nicolás Maduro.

Borges recibió fuertes golpes en el rostro de parte de presuntos partidarios del chavismo cuando lideraba frente a la sede del Consejo Nacional Electoral (CNE) una protesta de parlamentarios en favor del referendo para revocar a Maduro.

Otros de los más de 60 parlamentarios que estaban frente a la sede electoral acompañando a Borges fueron víctimas de acciones similares, sin que se conozcan hasta el momento la magnitud de las agresiones.

La violencia se inició cuando los diputados y seguidores de la oposición intentaron pasar la barricada de la Policía y la Guardia Nacional que custodiaba el CNE.

Los militares desalojaron a la fuerza a los diputados que, tras quedar en la mitad de calle, fueron agredidos a puños y con objetos contundentes por supuestos oficialistas que se abalanzaron contra ellos.

Los diputados se trasladaron al CNE para exigir una respuesta formal sobre el proceso de validación y verificación de las firmas con las que iniciaron hace más de un mes la solicitud del referendo revocatorio.