Las naciones más pequeñas y extravagantes del mundo

Las naciones más pequeñas y extravagantes del mundo

Conoce los países más pequeños y extravagantes que existen:

A la micronación de Whangamomona se llega a través de la Autopista del Mundo Olvidado
A la micronación de Whangamomona se llega a través de la Autopista del Mundo Olvidado

Algunas se crearon como forma de rebeldía ante el gobierno; otras, como forma de hacer un sueño realidad. Algunas, incluso, nacieron a partir de una broma, pero todas estas micronaciones esconden apasionantes historias que merecen ser contadas (la idea de una de ellas, de hecho, la acaba de comprar Disney). Pero, sobre todo, estos mini-Estados tienen detrás a valientes (¿o deberíamos decir lunáticos?) que pensaron que no había nada imposible. Ni siquiera construir su propio país.

Foto: Whangamomona. Texto: Marta Sader —

 

Akhzivland, de desahucio a destino turístico

 

Eli Avivi, un judío de origen iraní, llegó un buen día de principios de los 60 a un agradable enclave cerca de la frontera líbano-israelí, cerca del Mediterráneo. Decidió quedarse a vivir allí, de modo que construyó su casa. Durante diez años, el gobierno israelí estuvo haciendo la vista gordasobre su situación irregular, pero a partir de 1970, intentó echarle. Avivi, entonces, se fortificó en su hogar y convocó a los medios para dar una rueda de prensa, declarando la creación del Estado de Akhzivland con él como presidente, y creando posteriormente una bandera, un escudo y un himno, así como su propio sello para pasaportes. Gracias a su carisma, este judío acabó convirtiéndose en una celebridad, lo que le valió un acuerdo con Israel, que le arrendó el territorio durante 99 años y lo promovió como destino turístico.Hoy Akhzivland es tan popular que Avivi ha fundado un hotel y un cámping, además de un museo sobre su pequeño “país”.

Foto: Wikipedia / Rafael Guri / Creative Commons. Texto: Marta Sader —

Un país donde vivir y dejar vivir: Liberland

 

“Quería fundar un país distinto, donde se vivieran todas las libertades que existen en otras partes del mundo como Singapur o Hong Kong, pero no en el centro de Europa”, le dijo Vit Jedlicka a la BBC. Esa es la razón principal de que el presidente del Partido de Ciudadanos Libres en la Región de Hradec Králové (Republica Checa) fundase este mismo año Liberland, una nación basada en seis kilómetros cuadrados que nadie reclamó cuando se repartieron los territorios de la antigua Yugoslavia. Sus vecinos dicen que no se lo toman en serio, pero Croacia ya ha dispuesto en su frontera con Liberland un destacamento policial para que nadie pase desde su país hacia la nueva nación, cuyo lema, no obstante es “Vive y deja vivir”.

Foto: Corbis. Texto: Marta Sader —

 

Lea el artículo completo en Traveler.es

Exit mobile version