Marcos Hernández López: De las colas ¡Maduro es el responsable!

Marcos Hernández López: De las colas ¡Maduro es el responsable!

CONTEXTO VENEZUELA:
Enero 2015

Pregunta cerrada / Según su opinión, ¿Quién es el principal responsable de que se esté haciendo colas para comprar alimentos?





 Encuesta telefónica contexto Venezuela
Fecha 7 al 12 de Enero 2015

Venezuela vive una compleja crisis, bien sea por que nos afecta de manera particular o colectiva en la adquisición de los productos de primera necesidad, ya que las industrias se han visto altamente afectada por medidas económicas impuestas por el modelo económico de los gobiernos Chávez – Maduro, entre estas medidas tenemos: controles legales, devaluación constante del bolívar, regulaciones en los precios y control de divisas (importaciones); esta realidad explica por qué la mayoría de las industrias se han visto en la obligación de cerrar sus puertas de manera definitiva.

Dentro de una lógica, el gobierno debe reconocer la problemática de la escasez y desabastecimiento, sin embargo, los funcionarios del régimen hacen todo lo contrario, el ministro de Alimentación, negó la existencia de las largas filas que hacen los ciudadanos para adquirir productos básicos y señaló que él las hace para ir a juegos de béisbol. Evidentemente, son declaraciones destempladas que no ayudan a resolver sino enardecer a las personas que hacen a diario colas incluso por su antilógica.

La escasez ha impulsado a los venezolanos a no tener límite a la hora de exponerse o sacrificar algún beneficio para conseguir productos básicos, o incluso los no esenciales. Ya las peligrosas madrugadas son desafiadas sin miedo por la gente, es la hora aliada para iniciar la búsqueda de alimentos, medicinas, repuestos de vehículos, o cualquier producto que se consiga en los anaqueles. La paradoja es que hasta el gas o el petróleo, dos productos entrelazados con la riqueza del país, ahora se importan, también escasean.

Cuando estamos en las colas, las expresiones de la gente son muchas: “Aquí no se puede seguir viviendo. “Cualquier otro país es mejor que Venezuela”. “Hay que cambiar de gobierno”, “Este modelo comunista no es para Venezuela”… Obviamente, no hay nada mejor para poder hacer comprensión de lo que está ocurriendo es hablar con la gente que está en las colas y además lo está viviendo en primera persona. El problema del que todos hablan es la escasez y desabastecimiento hasta ponen sobre el tapete la inseguridad que está muy presente. La significación que tiene este problema, las personas sin temor ya vinculan la muy mala gestión con Maduro, cuestión que no pasaba con el comandante, sabia desmarcarse de sus nudos críticos.

 

¿La gente se acostumbró y esta resignada hacer colas?, El pueblo está en la calle, por primera vez todos los estratos sociales tienen una visión compartida sobre el tema de cambiar el régimen por ineficiente, por su responsabilidad en la crisis afecta a todos, solo un pequeño grupo tal vez se resigne por estar aún comprometido de corazón con el proyecto revolucionario. Es decir, las leyes habilitantes no ayudaron en nada a potenciar la economía venezolana, las legislaciones solo quedaron firmadas y en el discurso político del primer mandatario.

En síntesis, las personas se agrupan a las puertas de los mercados o abastos porque saben que la economía se está quedando sin inventario, emerge con mayor fuerza la escasez y el desabastecimiento, ha llevado al venezolano a invertir más cantidad de tiempo en la búsqueda de alimentos, no es razonable una persona invierte a la semana hasta ocho horas que equivale a una jornada de trabajo en hacer sus compras habituales, otro aspecto significativo, ahora el venezolano visita casi a diario los cajeros automáticos porque el dinero en efectivo no le alcanza y tiene que tener una reserva en el bolsillo por si acaso en el camino se encuentra una cola que estén vendiendo algo más para su existencialismo. Toda una angustia o tragedia.

Lo que sí es una verdad absoluta es que las declaraciones emitidas a los medios por el alto gobierno, no apuntan resolver la crisis y menos a tener respeto por una población día a día pierde su tiempo en kilométricas colas: “Si se vienen a las dos de la mañana es porque quieren”…“Hijitos de papa pusieron a hacer cola y encarecieron los productos, le dificultaron el acceso a los bienes y servicios a la población”… “Yo hice cola el otro día para entrar a un juego, hice cola para ir a mi asiento”… en las largas colas se potencia una opinión demoledora que se traduce en números rojos, rojitos, este régimen hay que cambiarlo por ser el responsable directo de la crisis económica.

Marcos Hernández López / Director – Hercon

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