Antonio De La Cruz: Venezuela y su sostenibilidad financiera

Antonio De La Cruz: Venezuela y su sostenibilidad financiera

La caída de las reservas liquidas internacionales venezolanas –la semana pasada- a un nivel que garantizaría una semana de importaciones de bienes conlleva a evaluar los ingresos de Petróleos de Venezuela S.A (PDVSA), porque hoy aporta el 96,2 por ciento de las divisas que ingresan al país.

PDVSA ha adoptado diferentes modalidades de pago para cobrar los embarques de crudos y productos refinados a los clientes en el exterior. Los mismos van desde el pago con instrumentos financieros (carta de crédito, bonos emitidos por PDVSA, notas promisorias) hasta, en especie como compensación: caraotas, ganado vacuno, leche, café, azúcar, novillos, pantalones, entre otros [PDVSA Informe de Gestión Anual 2012].

Ahora bien, el cliente que cancela su factura con dólares constantes y sonantes es Estados Unidos de América (EUA) a través de cartas de crédito. China, también, paga los cargamentos de crudos y productos en dólares constantes y sonantes, lo que ocurre es que del monto total cancelado se cobra el capital e intereses del crédito otorgado a la Republica (préstamo chino) y sí existe un saldo a favor de PDVSA, lo deposita en la cuenta que tiene el Banco de Desarrollo Económico y Social (BANDES) en el Banco de Desarrollo de China en Bejín.





Por otra parte, los países que forman parte de los acuerdos PETROCARIBE cancelan la factura petrolera con productos -como compensación- y los del Convenios de Cooperación Energética (CCE) con papeles de la deuda de PDVSA y/o notas promisorias que son depositadas en una cuenta de un banco fiduciario en Venezuela o el exterior, por ejemplo la Administración Nacional de Combustibles, Alcoholes y Portland (ANCAP), de Uruguay.

Por lo tanto, la factura a las refinerías americanas es la que permite obtener las divisas que requiere el país para su funcionamiento.

Cuando comparamos las ventas de crudo de PDVSA a EUA, 2012 – septiembre 2013, se observa que la producción promedio diaria ha disminuido en 173 mil barriles por día (mbd) equivalente a 6.308 millones de dólares al año; con un precio promedio por barril de 100 dólares. (Gráfico 1)


Gráfico No. 1

Así mismo, la tendencia a importar productos derivados desde las refinerías en EUA ha incrementado para el período 2012 – julio 2013, con un volumen promedio año de 87 mbd. (Gráfico 2)


Gráfico No. 2

Por otra parte, desde enero 2012 hasta julio 2013 la totalidad de los productos derivados importados desde EUA ha tenido un aumento de 131 por ciento. Para el 2012, la importación de gasolina representó un 40 por ciento, mientras el MTBE, (Metil tert-butil éter)-utilizado para incrementar el octanaje de la gasolina sin plomo-, 21 por ciento y el fuel oil 12 por ciento. Mientras que la importación en el 2013 (julio), el fuel oil participa con 23 por ciento, la gasolina 28 por ciento y el MTBE el 23 por ciento. (Gráfico 3)


Gráfico No. 3

Durante estos dos años, la importación de gasolina ha sido el producto más requerido, sin embargo se observa un incremento del consumo de fuel oil de 100% en el 2013.

En consecuencia, lo que realmente ingresa a PDVSA es la diferencia entre lo barriles exportados e importados, exportación neto, que presenta una tendencia a la baja promedio de un 22% desde enero 2012 hasta julio 2013. (Gráfico 4)


Gráfico No. 4

Este comportamiento de ventas netas a EUA, produciría un ingreso para el 2013estimado en 24.397 millones de dólares, con un precio de la cesta venezolana promedio año de 100 dólares. Lo que representa una caída en ingresos de 27 por ciento de la facturación a EUA en el 2012.

La caída de los envíos de crudos a EUA de 13 por ciento en el 2012 y 9 por ciento hasta septiembre 2013 muestra una correlación con la declinación típica de los yacimientos petrolíferos maduros en Venezuela; lo que indica una caída de la producción total de crudos anual de PDVSA.

En cuanto a los ingresos por la venta entre 470 y 500 mbd de crudos y/o productos a China National Petroleum Corporation (CNPC) son reflejados sólo en el estado de resultados consolidados de PDVSA ya que en la práctica es un mecanismo de pago del préstamo otorgado al BANDES en los años 2010, 2011 y 2012 (28.000 millones de dólares). Es cierto, que existe un remanente por la diferencia entre el precio del barril facturado –mercado- y el estimado en la solicitud del préstamo. Estos fondos son depositados en la cuenta en dólares que el BANDES tiene en China y son liberados una vez cancelado la totalidad del crédito. Por lo tanto, este año se estarían liberando 6.400 millones de dólares correspondientes a la renovación del tramo A del 2010.

En los países que forman parte del acuerdo de PETROCARIBE, la modalidad de pago de la factura por el suministro de crudos y/o productos refinados es financiado a un plazo de 15 años, con un periodo de gracia de hasta 1 año y medio. Es decir, que en el 2013 PDVSA no obtiene ingresos por la venta de crudos y/o productos de este año. Los pagos de intereses y la amortización de capital de la facturación correspondiente al período 2002-13, países como Nicaragua, Guyana y Republica Dominicana utilizan el mecanismo de compensación, es decir, cancelan con productos. En el caso de hacer el pago en dólares, los mismos son transferidos para financiar los proyectos sociales que se ejecutan en esos países deudores de la factura petrolera. Es decir, Venezuela –PDVSA- ha dejado de ingresar por esta vía 250 millones de dólares hasta 2013.

En el caso de Uruguay la cancelación de la deuda por la factura petrolera se realiza a través de una cuenta fiduciaria en el Banco del Tesoro C.A. con notas promisorias emitida por ANCAP equivalente al monto adeudado a PDVSA; utilizando como paralelo los Bonos PDVSA 2022. Los recursos en el fidecomiso son usados para el desarrollo de proyectos que van desde el programa de ganadería de altura de Corpozulia, asistencia técnica a empresas cooperativas del Ministerio de Infraestructura de Venezuela, adquisición a Uruguay de plantas potabilizadoras de agua y medicamentos antineoplásicos para el programa del cáncer en Venezuela, al igual que transferencias de recursos al Ministerio de Salud Uruguayo.

Argentina emplea la modalidad de cancelar la factura petrolera con pagarés y letras de cambio que a la vez son empleados para pagar a las empresas argentinas que suministran bienes y servicios a Venezuela.

Por lo tanto para este año 2013, PDVSA por concepto de exportaciones neto al exterior -EUA y China- ingresaría -constante y sonante- a caja 30.797 millones de dólares, ya que los recursos fruto de las venta de crudos y/o productos refinados a otros países son retornados al país deudor y en los otros son compensados con productos.

A grosso modo las necesidades de divisas del Estado venezolano y de la industria petrolera –PDVSA- están en el orden de 72.000 millones de dólares anuales.

En consecuencia, la situación actual de la industria petrolera compromete la sostenibilidad financiera de PDVSA y Venezuela, así como las posibilidades de crecimiento con justica social.