Juan Villoro: Maduro carece del carisma y la capacidad de gestión de Chávez

Juan Villoro: Maduro carece del carisma y la capacidad de gestión de Chávez

Foto: Archivo

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, carece del carisma y la capacidad de gestión de Hugo Chávez, y está obligado a “gobernar para todos” los venezolanos por los ajustados resultados de los comicios del 14 de abril, afirmó en una entrevista con Efe el escritor y periodista mexicano Juan Villoro.

EFE

Villoro, que esta semana ofreció en Montevideo una conferencia literaria tras participar en la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, consideró “muy significativo” y “un gran triunfo para la oposición” el número de votos que obtuvo el rival de Maduro, Henrique Capriles, el 49,12 por ciento del total.





En este escenario, el autor de novelas como “El Testigo” (Premio Herralde 2004) y columnista del diario mexicano Reforma, consideró que “para Maduro hay dos rutas posibles”.

“La de reconocer que él no tiene la popularidad de Hugo Chávez ni su capacidad de gestión” o “la de asentarse dogmáticamente en ese triunfo por la mínima diferencia”, explicó.

A Villoro, sociólogo de 56 años y observador crítico de la realidad latinoamericana a través de su pluma, le “preocupa” que el mandatario venezolano “tome la segunda postura” porque es “poco democrática”.

Creo que alguien que gana unas elecciones debe gobernar incluso para aquellos que no votaron por él y se ha tensado mucho la cuerda en el plano retórico”, advirtió.

A consulta expresa, reconoció que “en cuanto a la polarización, en Venezuela ha pasado algo semejante” a lo sucedido en México en 2006 con la victoria de Felipe Calderón sobre Andrés Manuel López Obrador.

Aunque consideró que entre ambas elecciones “hay cosas muy diferentes”, pues el chavismo es “un movimiento desde abajo que constituye una nueva casta de poder pero que no viene por los circuitos tradicionales de la economía”.

Por contra, “en México quien ha frenado el cambio ha sido el Consejo Coordinador Empresarial” en un país regido por “monopolios” en sectores claves de la economía.

El escritor, que fue agregado cultural de la embajada de México en la República Democrática Alemana (RDA) en los años 80, es un abierto simpatizante de la izquierda mexicana.

Villoro se refirió también a los intentos del presidente estadounidense, Barack Obama, de poner coto a la venta de armas en ese país, cuyo tráfico ilegal a México es considerado una de las razones de la ola de violencia de los cárteles de droga mexicanos en los últimos años.

“No sé si gane esta batalla Obama. Yo soy pesimista. No ha sido un presidente muy ejecutivo”, opinó el escritor, que en 2010 recibió el Premio Internacional de Periodismo Rey de España por el reportaje “La alfombra roja, el imperio del narcotráfico”.

Para Villoro, al gobernante estadounidense le va a resultar casi “imposible” cambiar a “una sociedad de enorme violencia”, que tiene una constitución “en la que en la segunda enmienda identifica la posesión de armas con la libertad individual”.

“Estados Unidos tiene el 5 por ciento de la población mundial y el 30 por ciento de los presos del mundo”, recordó.

El escritor mexicano acaba de publicar una antología personal que reúne 30 años de trabajo en dos géneros, el cuento y la crónica, con el título de “Espejo retrovisor” (Seix Barral), elaborada con el método que considera “más sincero” para un autor “que es la memoria”.

“No traté de hacer una valoración de qué textos son mejores y cuáles me parecen más perdurables (sino que) fui fiel a los recuerdos, a aquellos textos que me llegaban con mayor insistencia y me representaban mejor”, reveló.

Además, en julio se estrenará como autor de monólogos con la obra “Conferencia sobre la lluvia”, que será representado por el actor Diego Jáuregui, de la Compañía Nacional de Teatro mexicana.

El monólogo servirá para inaugurar el auditorio de la Ciudad de los Libros, una biblioteca reformada con donaciones de siete bibliotecas privadas de grandes escritores como Carlos Monsiváis, José Luis Martínez y Jaime García Terrés.