De más está decir que el Consejo Nacional Electoral se tomará todo el tiempo del mundo para tomar la decisión esperando que la calle se enfríe y los ánimos de la gente que está dispuesta a defender su voto pasen a un plano pasivo.
Mientras esto ocurre los cacerolazos continúan, los cohetazos también, al igua que las denuncias sobre actos violentos inexistentes. Los dimes y diretes a través de Twitter también están a la orden del día. El “echar deo” para culparse entre ellos. Que si tu eres más violento que yo, que si yo soy más pacifista que tu. Al final todos queremos lo mismo, la paz del país.
Tanto es así que hasta la misma Diosa Canales dijo “Solo deben permitirme reunirme con Nicolás Maduro y Henrique Capriles. Todo se soluciona con amor y a mí me sobra”. Lo que no especificó es que si se reuniría con los dos juntos o por separado.
Estamos ante el capítulo II de un culebrón que comenzó muy bien con la presentación de los actores involucrados y el rol de cada uno. Pasamos al nudo central que es el conteo o no de los votos y esperamos por el desenlace definitivo. Todo depende actualmente del árbitro que ya tiene la línea de una de las partes. Dependerá de ese árbitro seguir la línea del PSUV o tomar sus propias decisiones como Poder Electoral.
Hernán Porras
@hernanporrasm